Sin dinero, ni visión clara, la política de género en los estados de la República a través de los institutos de las mujeres va a la deriva por el desinterés de los gobernadores, pese a las buenas intenciones de políticas y activistas, y el compromiso de cumplir acuerdos internacionales para mejorar la condición de las mexicanas.
Para eliminar las inequidades de género, el gobierno del Distrito Federal destinará este año 11 pesos por cada mujer desde el Instituto de las Mujeres local, 2.5 en Jalisco, 5.3 en Michoacán, cerca de 7 en San Luis Potosí, 5 en Colima y Coahuila, 3.3 en Tabasco, y cero pesos en el estado de Nayarit, donde no existe un instituto estatal de las mujeres.
Lo anterior de acuerdo con un análisis de los datos oficiales de población y las cifras proporcionadas ayer por las diputadas locales presentes en el Primer Encuentro Nacional de Legisladoras de la Cámara de Diputados.
Las políticas refirieron presupuestos anuales de 52 millones de pesos para el instituto del DF; 8 para el de Jalisco, 11en Michoacán y cerca de 8 para San Luis Potosí, así como un millón 40 mil para Colima; 6 para Coahuila y 3 para Tabasco.
«Desgraciadamente cuando se negocian los institutos son eso, sólo negociaciones», en lugar del resultado de un trabajo de análisis sobre las necesidades de las mujeres, sostiene Rocío Gaytán , directora del Instituto Jalisciense de la Mujer, quien afirma «me interesa el apoyo de mi congreso, con leyes y con presupuestos».
«Los institutos dependemos de la voluntad política», lamentó también la diputada prisita. pese a que declaró que la institución encargada de verificar las políticas públicas de género no debe trabajar con buenas voluntades.
También es frecuente que los gobiernos locales esperen que las organizaciones de mujeres resuelvan la problemática de sus congéneres, bajo la premisa de qué lo hacen muy bien, sostiene la diputada federal Angélica de la Peña.
Para la diputada perredista de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), Maricela Contreras Julián, ex directora de los Centros Integrales de Atención de la Mujer (CIAM), es importante el proceso de revisión del origen porque el Inmujeres- DF en pocos años pasó de programa a instituto desconcentrado y luego descentralizado.
Aclaró que el Inmujeres-DF se ha planteado como un instituto normativo pero también operativo que baja a los institutos delegacionales equivalentes al nivel municipal, a lo que responden sus 52 millones de pesos asignados para este 2004.
Tras reiterar que los institutos estatales de la mujer responden a la necesidad de eliminar inequidades en la población femenina, además de responder a compromisos internacionales como los signados por México en Pekín durante la Cuarta Conferencia Mundial de la Mujer en 1995, las legisladoras acordaron apoyar a estas instituciones.
Las cerca de 200 legisladoras presentes en el encuentro se comprometieron a promover la realización de un foro de análisis para decidir y unificar los mecanismos de trabajo de los institutos de las mujeres y demandar más recursos para los organismos públicos, así como eliminar la disparidad en la entrega de sus presupuestos.
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