De un millón y medio de marinos que hay en el mundo ubicados en 87 mil buques, solamente entre el uno y dos por ciento son mujeres, pues se considera que esta actividad sigue siendo propia del sexo masculino, según reveló un estudio publicado por la Oficina Internacional del Trabajo, de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Según esta instancia, las mujeres de la marina se enfrentan a condiciones de trabajo duras, a discriminación y acoso sexual pues los hombres no están acostumbrados a trabajar en igualdad de circunstancias con las mujeres en este sector.
En los países escandinavos las mujeres representan más del 10 por ciento de la fuerza laboral del sector marítimo, mientras que en algunos países europeos las cifras varían: en Italia, por ejemplo, las mujeres representan únicamente el 1.2 por ciento de la fuerza laboral marítima; en Alemania un 4. 2 por ciento, mientras que en el Reino Unido la cifra asciende a 8.3 por ciento.
En Latinoamérica la participación de la mujer en el sector marítimo, de acuerdo a este estudio, sólo se registró en Brasil, en donde las mujeres representan el 1.1 por ciento de la fuerza laboral en este sector.
En el caso de Filipinas (país que suministra el mayor número de marinos a la flota mundial) de los 280 mil marinos registrados solamente 225 eran mujeres.
Y es que, por lo general, revela el informe, las mujeres son contratadas para los cruceros, en el personal de hostelería y en el personal subalterno.
De esta forma, los hombres continúan ocupando los cargos más altos, el 42 por ciento de ellos son oficiales contra solamente un siete por ciento de mujeres que pueden llegar a serlo. En cuanto al personal subalterno, el 58 por ciento corresponde a hombres y un 39 por ciento a mujeres.
Y es que, según el estudio, aunque los varones entrevistados reconocieron las habilidades y aptitudes de las mujeres para desempeñarse en este sector, lo que impide su ascenso es el sexismo, la intolerancia y el acoso.
«Las mujeres están más alerta. No quiero decir que son más inteligentes, pues no les hago pasar un test de inteligencia, pero las veo más comprometidas», respondió un entrevistado con cargo alto; sin embargo la realidad es distinta.
Otra de las situaciones encontradas en el estudio es la relativa a la maternidad, que continúa siendo un impedimento para escalar posiciones. De esta forma una mujer que se embaraza o bien es despedida o le ofrecen un empleo alternativo en tierra, por lo que se destaca la necesidad de contar con políticas que aborden cuestiones relacionadas con el acoso sexual, la menstruación, el embarazo, la anticoncepción, la maternidad y la salud médica general y sexual.
Sin embargo, refiere el estudio, las mujeres se interesan cada vez más en esta rama, por lo que se ha incrementado la matrícula de estudiantes en algunos países del mundo, además de que las que ya se encuentran tienen más acceso a la formación y capacitación para ocupar cargos de mayor jerarquía en la industria marítima y en tierra.
El estudio se realizó para conocer las necesidades y realidades de este sector en el que por vez primera se incluyó la perspectiva de género y fue realizado por expertos marinos del Centro Internacional de Investigaciones sobre Marinos, a través de entrevistas con personal de los buques: armadores, sindicatos, reguladores marítimos y con las propias mujeres marinos.
04/LGL/GMT
