Basándose en los derechos humanos, el Consejo Ciudadano por la equidad de género en los medios de comunicación y el derecho a la información de las mujeres busca ser el «ombudsman» de las mujeres ante los medios y pretende tener una injerencia en ellos para modificar contenidos y mensajes, indicó hoy Lourdes Barbosa, directora ejecutiva de este Consejo.
Durante el primer foro convocado por el Consejo Ciudadano, que se llevó a cabo ayer para analizar la presencia de las mujeres en los medios, Barbosa informó que este órgano se instaló el 4 de junio pasado, quienes lo integran tienen un trabajo en el tema de 15 o 20 años, y hasta ahora «nadie había querido tocar a los medios de comunicación».
Resaltó que este es el primer modelo a nivel internacional de este tipo, dijo, ya se han instalado observatorios para monitorear medios pero no se ha buscado una injerencia para modificar contenidos y mensajes: «Nosotros sí queremos tenerla y decirles, aquí hay una falla, estás violentando por esto, no estás considerando nuestros derechos, te exhortamos a que lo modifiques».
Barbosa señaló que el Consejo quiere tener la capacidad de poder convocar a la ciudadanía a realizar campañas de boicot porque en México, sostuvo, las y los ciudadanos no han podido defender su derecho a la información para ejercer la ciudadanía.
«A las mujeres se nos mandan mensajes para permanecer en el ámbito doméstico y para no ser ciudadanas», por lo que el Consejo busca rescatar este derecho de las mujeres, sostuvo Lourdes Barbosa.
El Consejo está conformado por 13 organizaciones civiles entre las que se encuentran Mexfam; Equidad de Género, Ciudadanía, Trabajo y Familias; el Centro de Apoyo a la Mujer «Margarita Magón»; Sipam; Afluentes, entre otras, y pretende tener un acercamiento con televisoras, radiodifusoras, medios impresos sobre el tratamiento de la información para las mujeres y promover que éstas accedan a los medios de comunicación.
Por ahora, trabaja en un monitoreo sobre cómo los medios manifiestan –con el uso de estereotipos y con la reproducción de roles– la discriminación y violencia contra las mujeres.
Del trabajo de análisis de monitoreo que realice esta instancia civil, se emitirán recomendaciones a las empresas y respectivos programas para modificar los mensajes.
Aunque Lourdes Barbosa reconoció que es una tarea difícil porque la industria está muy consolidada y no se ha permitido la influencia de la sociedad civil, «quienes integramos el Consejo creemos que es necesario empezar a tener esta incidencia y formar audiencia crítica, que sea el auditorio quien diga ya no quiero esto».
Actualmente el Consejo, financiado con recursos del financiamiento del concurso de coinversión de Indesol y el Instituto de las Mujeres del DF, trabaja a tres niveles: Consejo consultivo, instancia máxima directiva; comisiones de trabajo (de investigación, monitoreo, legislativa) y de audiencia, cada una integrada por profesionales.
«Hay que fomentar esta discusión y que las personas, quien enciende un televisor, quien escucha la radio, quien compra una revista o periódico pueda decidir sobre lo que está recibiendo, sabemos que no será sencillo pero estamos en ese camino», concluyó Barbosa.
07/LGL/CV