El Instituto de la Mujer Oaxaqueña (IMO) recibió el premio en honor a la Excelencia Educativa 2006, y su titular, Norma Reyes Terán, fue reconocida con un doctorado Honoris Causa y un master en Dirección Educativa.
Otorgados por el Consejo Iberoamericano, los reconocimientos fueron entregados en la ciudad de Buenos Aires, Argentina, dentro de la Segunda Cumbre Iberoamericana, Nuevas Currículas para la Excelencia Educativa, explicó Reyes Terán.
Añadió que éstos son el resultado de los programas académicos sobre equidad de género que el IMO imparte a los tomadores de decisiones del gobierno estatal.
Sostuvo que las personas formadas en estos programas educativos, desarrollan competencias que les permiten incidir en la transformación institucional y diseñar políticas públicas para eliminar las desigualdades entre las personas.
Reyes Terán señaló que durante la entrega de reconocimientos agradeció a las instituciones que componen esta asociación civil y recalcó la necesidad de reconocer la aportación de las mujeres a la historia y construcción social, económica, científica y política del mundo.
PROGRAMAS ACADÉMICOS SOBRE EQUIDAD DE GÉNERO
La titular del IMO dijo que es necesario que el movimiento feminista de Latinoamérica sea capaz de ubicar el marco teórico del feminismo en la academia y destacó que las relaciones entre los conceptos género, educación y desarrollo humano explican la desigualdad de oportunidades y resultados que las personas obtienen como producto de los procesos pedagógicos que cursan a lo largo de su vida.
Refirió que en su ponencia en la Cumbre, planteó los resultados de estudios que revelan que las mujeres alcanzan beneficios sociales inferiores en conceptos como el ingreso, permanencia, titulación y estudios de posgrado, que las mantienen en la subordinación.
Para lograr la eliminación de las disparidades educativas, en el ámbito internacional se han elaborado instrumentos que recogen el consenso relacionado con la eliminación de la discriminación sexual y sus manifestaciones en el terreno educativo, abundó.
El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo da cuenta de la relación entre desigualdad de género y desarrollo, negando a las sociedades patriarcales la posibilidad de alcanzar un nivel alto de bienestar, si antes no se resuelven las desigualdades que enfrentan las mujeres a causa de la condición y posición de su género.
Al referirse al modelo de gestión educativa que se emplea en Oaxaca desde 2003, que permite a los servidores públicos diseñar políticas públicas desde la perspectiva de género, destacó los resultados obtenidos y comentados por las expertas María Luisa Tarrés, Marcela Lagarde y Gloria Zafra.
Puntualizó que el punto de partida para incorporar la perspectiva de género en las políticas públicas es reconocer que las mujeres y los hombres tienen necesidades específicas y que se apropian de manera diferenciada de los recursos y beneficios, lo que da como resultado una sociedad asimétrica.
«La gestión educativa en el avance de la equidad de género en América Latina juega un papel destacado».
06/SJ/LR
