Desde hace unos días circula en Internet un documento firmado por 55 personas y organizaciones, entre ellas Marta Lamas, académica feminista y Rosario Ibarra, luchadora social y presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Senado de la República, donde proponen la candidatura de Irina Layevska Echeverría Gaitán para la dirección del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred).
Irina –señala la carta de apoyo dirigida a la Asamblea Consultiva del Conapred y a la sociedad en su conjunto– es una mujer que ha luchado toda su vida por tener el derecho a ser ella misma, se ha enfrentado a diversas formas de discriminación (por su historia política de izquierda; por ser una persona con discapacidad física y por tener una condición transexual).
Todos estos hechos le han forjado una visión de la imperiosa necesidad de construir un México mejor, incluyente y participativo, en donde la discriminación sea un hecho del pasado, y no del presente de la cotidianidad nacional. Afirman además, la necesidad de continuar con el trabajo que desempeñó Gilberto Rincón Gallardo, titular hasta su muerte del Conapred.
A Irina Layevska Echeverría Gaitán le acompaña también una trayectoria política, desde el movimiento estudiantil universitario (CEU), pasando por el Partido Socialista Unificado de México (PSUM); el Partido Revolucionario de las y los Trabajadores (PRT), formando parte de su Comité Central; y trabajos en movimientos de solidaridad con Nicaragua, El Salvador y Cuba.
El perfil ético-político de Irina Layevska Echeverría Gaitán, señalan quienes apoyan su elección para el Conapred, garantiza el liderazgo requerido para la continuidad de la lucha y la erradicación del problema severo que representa la discriminación en nuestro país.
La misiva está precedida por un mensaje de la propia Irina, en el que expresa que la derecha dará su esfuerzo para evitar que triunfe su candidatura. Pero, dice, acepté dar esta lucha, para hacernos escuchar y que el Conapred «no se convierta en una oficinita de quejas anexa de Gobernación.
Desde 2003, señalan quienes apoyan a Irina, el Conapred, con Gilberto Rincón Gallardo al frente, se constituyó en un proyecto institucional serio, ético y con un alto compromiso social contra la discriminación en nuestro país.
Creemos, dicen, que la persona que se desempeñe al frente del Consejo, además de tener la visión de una política de Estado en materia de no discriminación y el compromiso con el laicismo consagrado por nuestra Carta Magna,debe haber experimentado en carne propia la discriminación y haber luchado contra ella desde una visión social de igualdad y derechos y no meramente asistencialista.
De ahí que consideren a Irina como la persona que cumple con el perfil necesario para continuar con el proyecto impulsado por Rincón Gallardo en materia de no discriminación.
Firman la misiva, entre otras personas y organizaciones: Marta Lamas, Rosario Ibarra, Amparo Martínez Arroyo, Edgar Sánchez, Nélida Reyes Guzmán, Héctor de la Cueva, Enrique Scheinvar Gottdiener, Norma Malagón Serrano, Luz Consuelo Lozano Nathal, Ernesto Scheinvar Gottdiener, Julieta Pérez Girón, Beatriz Leticia García Banda, Beatriz Argelia González García, Humana «Nación Trans» y Hazel Gloria Davenport.
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