Mujeres sindicalistas demandarán a la Cámara de Diputados que en la reforma a la Ley Federal del Trabajo (LFT), prevista para su aprobación en el próximo periodo de sesiones que inicia en septiembre, se incluyan disposiciones que garanticen la corresponsabilidad del Estado en las labores de cuidado familiar.
En entrevista, Beatriz Luján, del Frente Auténtico del Trabajo (FAT), dijo que si se busca lograr equidad entre mujeres y hombres en el ámbito laboral y familiar es preciso impulsar acciones que disminuyan las tensiones que enfrentan las trabajadoras para conciliar sus múltiples tareas.
Hasta ahora las iniciativas de reforma a la LFT de los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Acción Nacional (PAN) «no atienden esta necesidad de armonizar dichos ámbitos, por el contrario, proponen empleos por horas que nos permitan realizar la doble o triple jornada de trabajo».
Cabe recordar que en México el 97 por ciento de las 16.9 millones de mujeres trabajadoras, además de cumplir con su labor asalariada, realiza tareas domésticas y de cuidado familiar, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Advirtió que «si se aprueba la iniciativa del PRI y PAN, significaría más deterioro en el empleo de las mujeres, sobre todo de las jóvenes, pues con la contratación a prueba o por horas, quedan sin derechos individuales y colectivos, y en esa circunstancia se imposibilita la inclusión de la distribución de responsabilidades familiares».
La propuesta de las sindicalistas, contenida en la iniciativa de reforma del Partido de la Revolución Democrática (PRD), señala que las licencias de maternidad deben hacerse extensivas a los hombres trabajadores, a fin de que participen del cuidado familiar.
De acuerdo con el estudio Armonización entre los ámbitos laboral y familiar en México, elaborado por el Centro de Estudios para el Adelanto de las Mujeres y la Equidad de Género (CEAMEG), de la Cámara de Diputados, las instituciones no han considerado que los hombres tienen responsabilidades familiares y, en consecuencia, no los toman en cuenta para que tengan licencias laborales.
Además de las licencias de paternidad, las sindicalistas proponen que la seguridad social se universalice de modo que las madres trabajadoras del sector informal tengan acceso a servicios públicos de protección a la niñez, personas adultas mayores y con discapacidad.
Hasta ahora, aseguró Luján, «no se ha hecho ninguna acción por parte del Ejecutivo y mucho menos la Secretaría del Trabajo para atender esta demanda; por eso insistiremos en que en esta reforma laboral quede la regulación de responsabilidades familiares compartidas entre mujeres y hombres, empresas y gobierno».
Entre las acciones que llevarán a cabo los gremios están los foros de discusión, mítines informativos y la difusión de las demandas de las trabajadoras en medios de comunicación. Una de ellas es la ampliación del descanso de 6 a 8 semanas antes y después del parto.
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