Hasta dentro de dos o tres años se verán reflejados los esfuerzos de la Secretaría de Salud en la prevención del cáncer cérvico uterino y se logrará que los índices de incidencia de este padecimiento estén por abajo de la media nacional, los cuales en los últimos años han colocado al estado en los primeros lugares en el país, informó el jefe del Departamento de Prevención y Control de Cáncer Cérvico Uterino, Arturo Bustamante.
El funcionario estatal aseguró que el rezago en la lectura y entrega de resultados de la toma de papanicolaou que hubo hace cuatro años se ha abatido, y que en la actualidad se cuenta con un mayor número de personal para entregar a las mujeres con oportunidad los resultados de las citologías que se les toman, conforme lo señala la Norma Oficial Mexicana respectiva.
Refirió que ante el incremento de personal, en el 2001 se realizaron 106 mil tomas de papanicolaou a igual número de mujeres de toda la entidad, y esta acción ha permitido reducir los índices de cáncer cérvico uterino (cacu) entre las oaxaqueñas.
Expuso que en el año 2000 se presentó una incidencia de casos de cacu de 14.8 por ciento por cada mil mujeres mayores de 25 años que se hicieron la citología vaginal. En el 2001 se redujo a 12.4 por ciento, lo que significa una disminución de 2.4 puntos porcentuales.
Mencionó que en los dos últimos años se detectaron también unas 600 displasias, lesiones que indican la presencia de cáncer cérvico uterino en etapas que pueden ser manejadas con tratamiento y evitar la muerte de las mujeres.
Bustamante informó también que para este año se autorizó la compra de dos unidades móviles que permitirá tomar un mayor número de muestras vaginales en las regiones donde las mujeres tienen menos acceso a este servicio, y con el beneficio de que los resultados de las citologías serán entregadas al momento, lo cual ayudará sobremanera a evitar más muertes por cacu.
Asimismo, anunció que en breve funcionará una clínica más de displasia, la cual se ubicará en el municipio de Huajuapan de León; sin embargo, lamentó que aún no se haya puesto en funcionamiento pese a contar con la infraestructura porque ningún médico colposcopista –especialista en la toma de muestras vaginales con colposcopio– quiere irse a esos lugares. «Todos quieren estar en la capital, pese a que tendrían un buen sueldo», comentó.
Indicó que a la fecha la Secretaría de Servicios de Salud en el Estado cuenta con clínicas de displasia, para atender los casos de cáncer cérvico uterino, en Juchitán, Pochutla, Tuxtepec, Cuicatlán y dos en la capital del estado.
Por otra parte, refirió que durante los cuatro meses que la Secretaría de Salud prestó una unidad móvil de detección oportuna de este tipo de cáncer para que recorriera las siete regiones del estado, pudieron tomar más de seis mil muestras, lo que ayudó a prevenir muertes curables.
Sin embargo, dijo que los avances preventivos y las acciones para abatir los índices de mortalidad por cacu a través de la detección oportuna y su tratamiento se verán reflejados hasta dentro de dos ó tres años, por el rezago de años anteriores.
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