Funcionarios de la Unión Europea visitarán la región loxicha el próximo fin de semana, para evaluar las condiciones sociales de esta zona y para analizar las posibilidades de financiar un proyecto de reconstrucción del tejido social, informó aquí el director general de Acción de los Cristianos por la Abolición de la Tortura (ACAT), Fernando Valadez.
En entrevista, el responsable de ACAT-México, señaló que esta organización no gubernamental tiene listo un proyecto de desarrollo comunitario integral para apoyar principalmente a las víctimas sobrevivientes de tortura de esa región estigmatizada como la cuna del Ejército Popular Revolucionario (EPR).
Explicó que el proyecto visualiza prioritariamente los derechos humanos de esos sobrevivientes, para apoyarlos tanto en su salud mental como en la parte jurídica, y en la consecución de la paz en esa región, «porque son lugares que han quedado muy lesionadas, lastimadas».
Sin embargo, consideró que ACAT se enfrenta en la región loxicha a una «estrategia de guerra», como el reciente crimen del presidente municipal de San Agustín Loxicha, Jaime Valencia Santiago, y la presencia de elementos del Ejército Mexicano «para asegurar la paz».
Asimismo, precisó que la organización que preside aún no cuenta con el financiamiento para poner en marcha el proyecto, pero que lo han presentado ante varias organizaciones y fundaciones nacionales e internacionales, aunque estimó que, con suerte, lo recibirán este año o en el 2003.
Fernando Valadez explicó que el proyecto para la región loxicha es a mediano y largo plazo, con una visión de trabajo comunitario no paternalista ni asistencialista, sino de formar promotores de salud mental comunitaria y de derechos humanos, para que poco a poco, sean las propias comunidades las que se vayan apropiando del conocimiento del saber para que puedan salir adelante.
Aseveró que tras contar con los recursos financieros para iniciar el proyecto, se partirá el trabajo desde las comunidades que fueron afectadas con la tortura, como la propia cabecera, San Agustín Loxicha, y otras menores como La Conchuda, La Sirenita, entre otras.
En los últimos cinco años, ACAT ha documentado más de 160 casos de tortura en Oaxaca, señaló Valadez, al término de una visita que realizó a los penales de Ixcotel y Etla para conocer la situación de los indígenas loxichas.
Expuso que los casos más conocidos de tortura en el estado son los de los llamados presos loxichas, ya que en el 96 fueron detenidas más de 200 indígenas de esta región de la Sierra Sur, de las cuales más de 170 fueron ingresados a diferentes penales de la entidad.
Dijo que además de los presos que fueron vinculados con el EPR, tienen documentados también casos «urbanos» y, en general, otros más relacionados con la llamada «guerra sucia» de los años 70.
Respecto a los indígenas loxichas recluidos en los penales de Ixcotel y Etla, señaló que se incrementó la preocupación de ACAT por éstos, ya que en estos mismos espacios también están presos sus «entregadores».
Precisó que en el de Etla están Flavio Almaraz Pacheco, Jesús Almaraz Pacheco, Artemio Almaraz Felipe, Guillermo Juárez López, Teófilo Hernández y Laureano García, que han estado al servicio del expresidente municipal de San Agustín Loxicha, Lucio Vázquez. «Eso es precisamente una de las técnicas de guerra psicológica», puntualizó.
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