El tema del sida fue aludido por el presidente George W. Bush en el segundo día de la Cumbre Extraordinaria de las Américas, dentro del rubro Crecimiento con equidad.
El presidente estadounidense señaló que es una labor conjunta para gobiernos, iglesias y organizaciones no gubernamentales la prevención de este problema.
Al tiempo que hacía la propuesta para la creación de un fondo común hemisférico para su combate, anunció que «el gobierno de Estados Unidos tiene el compromiso de ofrecer 15 billones (15 mil millones) de dólares para combatir el sida en los próximos cinco años, en nuestras naciones».
Acotó que no sólo se requiere trabajar en la prevención, sino en el tratamiento contra la pandemia, y se refirió al problema del costo de los medicamentos antivirales y su acceso a un costo mínimo para las personas afectadas y a que los líderes de gobierno deben tener la disponibilidad para distribuirlos de forma eficiente.
Comentó la efectividad del programa puesto en marcha en Uganda, llamado ABC: abstinencia, fidelidad y uso del condón, e hizo un llamado al trabajo multilateral para apoyar a las organizaciones que luchan contra el sida, gubernamentales y no gubernamentales, para salvar las vidas de aquellos niños que perdieron a sus padres por la pandemia.
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