Ciudad de México. Mujeres, defensoras de Derechos Humanos, periodistas y sociedad civil, realizaron una vigilia nacional feminista en diversas ciudades de Colombia con el fin de pedir un alto al feminicidio y a la violencia contra las mujeres y rendir un homenaje a la memoria de las asesinadas, desaparecidas y agredidas en lo que va del Paro Nacional, que se lleva a cabo desde el 28 de abril.
Esta vigilia fue convocada por el movimiento feminista colombiano para evidenciar que las mujeres y niñas son las más afectadas por la violencia extrema ejercida por los policías de su país, rechazar la militarización de los territorios, exigir justicia y reparación del daño para todas las víctimas y demandar que se informa a la ciudadanía sobre lo que se discute en las negociaciones.
Desde hace dos semanas, el comité del paro ha mantenido reuniones con autoridades colombianas, entre ellas el presidente de este país, Iván Duque, a fin de negociar y acordar soluciones que pongan un fin al Paro Nacional. Sin embargo, la población colombiana se opone a que este comité los represente pues está compuesto por personas políticas y no hay transparencia de lo que se disputa en estos encuentros.
Por tal razón, la vigilia feminista también se propuso como una forma para crear más lazos de comunicación entre las mujeres de distintos puntos de resistencia y se impulse su participación en las asambleas populares que están redactando el pliego petitorio que la población colombiana pretende entregar al presidente, aún sin una fecha definida.
“Estamos pidiendo al presidente que nos escuche, que venga a hablar con nosotras directamente. Somos quienes de una u otra forma estamos liderando los procesos de movilización en el país, pero no nos escuchan, sólo nos mandan al Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD), que es fuerza represiva, los civiles se están armando como fuerzas paramilitares y agreden a la población”, dijo en entrevista con Cimacnoticias, la defensora de DH y quien ha participado en las protestas, Luisa Escalante Berbersi.
En su opinión la violencia se agudizó más en estos días debido a que el ESMAD y la policía está atacando a la ciudadanía con armas en cualquier situación y a todas horas. “Han encontrado los cuerpos de personas desaparecidas en los ríos o no hay rastro de ellas”, añadió Escalante Berbersi.
Durante la vigilia, hubo una gran diversidad de participantes, desde muy jóvenes hasta adultas mayores, algunas realizaron performance, bailes y cánticos, otras hicieron pancartas con la leyenda: “Nos queremos vivas”; otras más armaron ofrendas con flores y en cada ciudad donde se citó a esta acción se colocaron velas para reivindicar las historias y nombres de las mujeres que han sido desaparecidas, asesinadas, agredidas sexualmente o heridas en los ojos.
Datos de las organizaciones civiles registraron hasta el 28 de mayo que la violencia policial ha dejado: mil 133 víctimas de violencia física, 43 homicidios, mil 1445 detenciones arbitrarias, 648 intervenciones agresivas, 47 víctimas de heridas oculares, 175 asesinatos con armas de fuego, 22 víctimas de violencia sexual, de las cuales 3 fueron menores de edad y 2 casos de feminicidio.
Las velas también fueron empleadas como un símbolo de resistencia, fuerza y paz ante la violencia en ciudades como Cali, Bogotá, Popayán, Bucaramanga, Pereira, Chocó, Antioquia, Cartagena y Bolívar. “Las feministas y organizaciones de mujeres encendemos la luz en un país en el que la oscuridad ha sido pretexto para cometer todo tipo de crímenes”, publicó la organización civil Casa de la Mujer en su cuenta oficial de Twitter, la cual estuvo presente en la vigilia.
Las convocantes de esta acción feminista llamaron en un comunicado a que se cumpla con la prohibición constitucional de que los civiles, paramilitares, autodefensas y otros grupos no estén armados, exigieron la renuncia del Ministro de Defensa de Colombia, Diego Maldonado, así como que se permita la visita inmediata de trabajo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) a su país y se modifique la reforma de seguridad.
“Necesitamos acuerdos para enfrentar las profundas desigualdades que existen en el país, en particular, en la desigualdad de género, en la protección de las mujeres campesinas y los territorios. Se ponga en marcha un plan de emergencia que afronte los efectos de empobrecimiento, en específico de las ciudadanas afectadas por la pandemia y la violencia”, dijeron.
La vigilia que comenzó a las 4:00 de la tarde terminó a altas horas de la noche sin reportes de violencia hacia las participantes, quienes gritaron una vez más sus demandas: “Las balas no apagan el eco de las voces que gritan respeto por la vida”, “No más asesinatos de lideresas”, “por nuestras hijas e hijos colombianos mis oraciones y acciones siempre presentes en la marcha” antes de retirarse a sus hogares.
Esta mañana la CIDH confirmó que visitará a Colombia del 8 al 10 de junio para verificar la situación de los Derechos Humanos durante las jornadas del Paro Nacional, en particular buscará escuchar a las víctimas y a sus familiares para recolectar testimonios y denuncias y se reunirá con autoridades de este país.
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