Ciudad de México.- La ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Ana Margarita Ríos Farjat, aseguró que dentro de la reforma al Poder Judicial del presidente Andrés Manuel López Obrador no se han contemplado los reclamos de colectivas que defienden los derechos de mujeres quienes tienen algo que decir, sobre todo en el fortalecimiento de la defensoría en todos sus niveles para garantizar el acceso a la justicia.
En febrero de este 2024, se presentó el Informe Nacional sobre Centros de Justicia para las Mujeres 2018 – 2021 en el que se informó que en el país hay 65 Centros de Justicia para mujeres, pero solo el 5 por ciento de las víctimas de violencia buscaron apoyo o información con estos sitios.
Es importante saber que en México existen 65 Centros de Justicia para las Mujeres (Cejum), creados en 2010 por la Secretaría de Gobernación, quienes, a través de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contras las Mujeres (CONAVIM) ofrecen servicios especializados integrales e interinstitucionales, y están encargados de atender a mujeres y niñas, víctimas de violencia familiar en la búsqueda de garantizar su derecho a una vida libre de violencia.
Entre 2019 y 2022 estos centros han brindado atención especializada a 817 mil 882 mujeres que asistieron por primera vez a buscar apoyo, por lo que, en promedio, en esas fechas se atendieron a 560 mujeres por día en el país.
Ríos Farjat subrayó la necesidad de que también fiscalías y procuradurías deban ser llamados a la mesa, pues no se puede llevar a cabo una reforma que deje de lado la experiencia que han recogido: fiscalías, comisiones de derechos humanos, comisiones de atención de las víctimas, entre otras, y pensar también en otros mecanismos.
“Yo creo que hay algunas cuestiones que faltan en la iniciativa de reforma y sería muy interesante y muy importante que realmente se tomaran, y me parece muy sensato lo que usted señala de recoger los reclamos de los colectivos y de sectores vulnerables, pues tienen algo que decir sobre una reforma judicial, no nada más es como elegimos este o cómo quitamos”, expresó.
Ana Margarita Ríos Farjat.
Tras participar en los Diálogos Nacionales sobre las Reformas Constitucionales al Poder Judicial en la Cámara de Diputados, la ministra Ana Margarita Ríos Farjat fue consultada por Cimacnoticias sobre el contenido de la reforma al Poder Judicial y su aportación para los procesos de mujeres que impulsan las colectivas en la búsqueda de justicia.
Ana Margarita Ríos Farjat manifestó la necesidad de saber hacia dónde queremos ir como sociedad, y será hacia un mejor horizonte, por lo que se debe platicar sensatamente, con respeto, empatía, buena intención, buen ánimo y con espíritu para lograr avanzar hacia algo mejor.
Al respecto, la ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación manifestó la necesidad de saber hacia dónde queremos ir como sociedad, y será hacia un mejor horizonte, por lo que se debe platicar sensatamente, con respeto, empatía, buena intención, buen ánimo y con espíritu para lograr avanzar hacia algo mejor.
También, agregó, se debe construir algo bueno, con lo mejor de cada sector y de todas las personas y de esa manera lograr que sus procesos judiciales puedan adelante, “y no se rinda en su tema (de hacer énfasis en la situación de las colectivas), yo creo que es muy importante el tema que usted acaba de mencionar de los colectivos y las minorías”.
Consideró que las fiscalías y los ministerios públicos deben ser tomados en cuenta, porque es una realidad que la sociedad mexicana entiende que son parte de un sistema de justicia, así como los policías, es decir todo aquello que son una autoridad, muchas personas tienen la idea de que esta reforma hay que ampliarla, que abarque las problemáticas que presentan tanto las personas que enfrentan procesos, como también las propias fiscalías y procuradurías para mejorar sus capacidades institucionales en beneficio de la gente.
No dejar de lado la experiencia
Ana Margarita Ríos Farjat refirió que una reforma legislativa al Poder Judicial debe contar con cuatro características: estar orientada a resolver problemas según la realidad, no desarreglar lo que funciona, ser económica e implementarse con sencillez.
La ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación mencionó que se debe ser creativos con las soluciones, “me atreví a poner sobre la mesa algunas ideas para reorientar incentivos y podamos mejorar todo”.
Agregó que es importante el fortalecimiento de los poderes judiciales de los estados y llamó a fortalecer las escuelas de formación judicial y las clínicas de asesoría jurídica gratuita, además de incorporar en los poderes judiciales locales, la figura de jueces mediadores.
Dijo que se debe reconocer que México enfrenta a una dura y añeja realidad y es que mucha gente concibe a las fiscalías, procuradurías, defensorías, comisiones de Derechos Humanos, de búsqueda y de atención a víctimas como parte del sistema de justicia donde se presentan muchas problemáticas que no están siendo abordadas en la iniciativa de reforma del presidente López Obrador.
Indicó que falta dimensión social en la judicatura, pero siempre es posible mejorar, se puede hacer un ajuste a la carrera judicial para que la escuela de formación facilite que futuros jueces incluyen 1 año de servicio social jurídico no gratuito en defensorías públicas, centros de atención, estaciones migratorias, así como en comunidades indígenas dónde hay infancia maltratada y tanta falta hace.
La carrera judicial no debe desaparecer, sino mejorar para que siga siendo una de las más profesionales de México y donde además existe movilidad social, “de por sí son pocos los espacios que permiten movilidad social, necesitamos preservarlos”, precisó.
Ministra de la SCJN
Agregó que eso la lleva al tema de clínicas de asesoría jurídica gratuita, para que la defensoría pública se lleve a cabo con universidades, a fin de que jóvenes abogados de la mano de la abogacía profesional brinden ayuda legal en zonas marginadas, por ejemplo en casos como si un adulto mayor va a prestar dinero, que lo documente; si una mujer renta su vivienda, que lo formalice.
Esto es, precisó la ministra, no solo ayudar cuando hay problemas, sino evitárselos, “esta, por cierto, es una idea que quedó en el tintero de las desarrolladas en el Plan de Nación del presidente López Obrador, es lamentable que no se ha llevado a cabo”, consideró.
La ministra de la SCJN, Ana Margarita Ríos-Farjat, señaló que México enfrenta una realidad en la que las consejerías son vistas como impartidoras de justicia.
Señaló que la reforma debe estar orientada a resolver problemas, no desarreglar lo que funciona, ser económica y con una implementación sencilla. Además, propone dar incentivos fiscales para garantizar una estabilidad económica a los jueces.
También mencionó una iniciativa para mejorar la visión social en el Poder Judicial, con un requisito de un año de servicio social en defensoría del pueblo para quienes quieran ser jueces.
Compromiso de fortalecer diálogo
También, consejeras de la Judicatura Federal (CJF) refrendaron su compromiso con fortalecer, desde el diálogo e intercambio de experiencias, la iniciativa de reformas al Poder Judicial de Federación (PJF), al participar en los Diálogos Nacionales en la materia que convocó la Cámara de Diputados.
La consejera Eva Verónica de Gyvés Zárate expresó que hay muchas cosas que pueden rescatarse del sistema que hoy tenemos, pero el objetivo es maximizar el principio de acceso a la justicia para lograr un auténtico estado de derecho, donde las personas juzgadoras cumplan con sus responsabilidades en el marco de la ley e impartan justicia de manera imparcial y expedita.
Indicó que se debe poner especial atención en los filtros por medio de los cuales se seleccione a Ministros, Magistrados y Jueces. “Mi propuesta es que la sustitución de personas juzgadoras a nivel federal sea progresiva, es decir, de forma gradual en los distintos estados de la República”, agregó.
Verónica de Gyvés señaló que la reforma judicial es para que el Poder Judicial sea cercano al pueblo, haciendo más eficiente la impartición de justicia, para lograr un verdadero Estado de derecho.
Pidió poner atención en los filtros de elección, que sean confiables y certeros y que incluyan estándares de alto nivel.
También, propone en que la sustitución de los juzgadores sea progresiva, atendiendo las cargas de trabajo, para no afectar la impartición de justicia.
A su vez, la consejera Lilia Mónica López Benítez se pronunció por una reforma al PJF, pero con base en mecanismos disciplinarios ágiles y efectivos y también disuasivos. Con un sistema de justicia reforzado a partir del diálogo, unanimidad y respeto institucional y que fortalezca la independencia de los tres Poderes de la Unión.
Se pronunció por un Poder Judicial que escuche a las personas, que resuelva en los plazos legales y que haga uso de los avances tecnológicos para mejorar el acceso a la justicia y a la información, y para fortalecer la vinculación social.
La consejera de la Judicatura Federal, Lilia Mónica López Benítez, señaló que se requiere un Poder Judicial independiente, capacitado, sin nepotismo y que haga uso eficiente de los recursos.
También se pronunció por hacer uso de la tecnología para mejorar los proceso y trámites.
La directora Nacional de la Asociación Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de distrito del Poder Judicial Federal, la jueza Juana Fuentes Velázquez, cuestionó que los juzgadores electos por el voto pueden servir a los intereses que los llevaron al cargo.
Afirmó que dicho método de elección puede generar desventajas y riesgos al cuidar la Constitución, por o que pidió que no se tome de manera acelerada.
Aseguró que dicho proceso lesiona los derechos y viola legislaciones internacionales, además, puede generar inseguridad jurídica, junto con la afectación a los derechos adquiridos de los jueces.
