La prestigiosa revista médica British Journal publica el estudio más exhaustivo hasta la fecha sobre partos en casa en Canadá y EU, que incluye 5 mil 418 casos de mujeres que dieron a luz en casa en el año 2000, y de las más de 400 matronas que les atendieron, señaló hoy aquí Mujeres en Red.
La asociación El Parto Es Nuestro (EPEN), luego de conocerse esta información, señaló: «Queremos manifestar nuestra satisfacción porque una vez más, los estudios científicos realizados sobre el parto en casa en países desarrollados demuestran que parir en casa es una opción segura».
De los más de cinco mil nacimientos que ocurrieron en casa, según el estudio del British Journal, el 87% no tuvieron complicación alguna y transcurrieron con total normalidad.
Teniendo en cuenta estas cifras, seguir insistiendo en que la opción de parir en casa hoy en día no es una opción segura, es negar los estudios científicos que demuestran que parir en casa en países desarrollados puede ser una opción al parto hospitalario. No existe evidencia alguna de que dar a luz en el domicilio de forma planificada sea peligroso y arriesgado.
No tiene sentido alguno comparar el parto en países desarrollados, con alto nivel económico, como de nuevo demuestra el estudio publicado en el British Journal (Resultados en partos planificados en casa asistidos por comadronas, tituladas: Gran estudio prospectivo en Norteamérica, por Kenneth C. Jonson y Betty-Anne Davis), con situaciones de épocas anteriores, o de sociedades atrasadas, sin controles rutinarios de embarazo, falta de profesionales cualificados para atender el parto, problemas de nutrición en la población y condiciones precarias de higiene y salubridad en los hogares.
El estudio del British Journal arroja resultados espectaculares en algunos aspectos, comparando la intervención médica necesaria en partos normales (bajo riesgo) en hospital y en domicilio.
Episiotomías
En casa, las episiotomías se redujeron a un 2.1 por ciento, frente al 33 por ciento de hospital (EPEN insistió en el drama de la altísima tasa de episiotomías en España, que en primíparas es prácticamente del 100 por ciento. Miles de mujeres son víctimas de una práctica médica que en otros países de nuestro entorno se aplica de forma excepcional y no como rutina debido a que puede provocar graves consecuencias para la salud física y reproductiva de las mujeres. Incontinencias urinarias, disfunciones sexuales, etc.).
Cesáreas
En casa, el traslado a hospital y el recurso a cesáreas se situó en el 3.7 por ciento. En partos de bajo riesgo en el hospital, el 19 por ciento de ellos acabó en cesárea. De nuevo, España tiene una tasa de cesáreas del 23.5 por ciento (20.8 por ciento en sanidad pública, 31 por ciento en privada.
Satisfactorio para las mujeres
Un 97 por ciento de las madres que parieron en su casa se mostraron muy satisfechas o extremadamente satisfechas con los cuidados recibidos por parte del profesional que les atendió. Como dato añadido, seis semanas después del parto el 95.8 por ciento de las mujeres que habían dado a luz en su casa seguían amamantando y el 89.7 por ciento de ellas en exclusiva.
Ahorra costos
El estudio señala que el parto hospitalario normal es tres veces más caro que un nacimiento similar ocurrido en casa. «Nuestro estudio de las matronas profesionales sugiere que alcanzan buenos resultados en mujeres con bajo riesgo sin el uso de costosas intervenciones hospitalarias por rutina», se indica en los resultados.
La Asociación El Parto Es Nuestro solicita que en España el parto domiciliario esté incluido en la Seguridad Social como alternativa posible al parto hospitalario para todas aquellas mujeres que así lo deseen.
En la actualidad, cualquier mujer que en España desea dar a luz en su domicilio (según datos INE nacieron poco más de mil niños en casa atendidos por profesionales cualificados durante el 2001) ha de recurrir a sufragar de su propio bolsillo la atención profesional de una matrona, y se enfrenta a la extendida y generalizada opinión de que es una opción peligrosa para ella y su hijo, cuando estudios científicos como el del British Journal demuestran que no es más que un prejuicio sin evidencia científica alguna que lo sustente.
En países como Gran Bretaña, Holanda o Alemania, entre otros, el parto domiciliario está cubierto por la Seguridad Social y es una alternativa posible al parto hospitalario.
05/GM