Se presentó la “Brigada Femenina 031 Combatiente de Incendios Forestales”, la primera en el Estado de México integrada en su totalidad por mujeres, quienes buscan proteger sus bosques en sus ejidos y comunidades.
Estas 31 mujeres son amas de casa, ejidatarias, comuneras, artesanas, estudiantes de ingeniería forestal, jubiladas, campesinas, horticultoras. Juntas, desde distintos orígenes y ocupaciones, ponen “un ejemplo de lucha contra sus propios miedos, de fortaleza para sus familias, de unidad, de orgullo y motivación para más mujeres que sueñan, desean y no se atreven a romper barreras, reglas impuestas por la sociedad del campo donde siempre les han dicho que los trabajos de fuerza física, como el de combatir incendios forestales, son solo de hombres”, destacó el Consejo Civil Mexicano para la Silvicultura Sostenible en un comunicado.
Desde el año 2019, el Consejo Civil Mexicano para la Silvicultura Sostenible ha desarrollado una línea de trabajo y acompañamiento para fortalecer a mujeres de distintos núcleos agrarios; impulsando sus actividades económicas e inclusión social.
Fue así como a partir del año 2022 un grupo de mujeres se conformó para capacitarse durante 12 sesiones para formar la “Brigada Femenina 031 Combatiente de Incendios Forestales”.
Esta primera etapa de formación se realizó por medio de la colaboración que hubo con Cooperación Forestal México – Estados Unidos Programa México, con el Tecnológico de Estudios Superiores de Valle de Bravo y la Gerencia de Manejo de fuego de la CONAFOR.
“No queremos ser más fuertes y mejores que un hombre, queremos ser fuertes para explotar todas nuestras capacidades, utilizando nuestros propios recursos, entendimientos y conocimientos para poder dejar huella, una mejor semilla para nuestras tierras y un mundo mejor para futuras generaciones”, declaró Cruz Ávila integrante de la Brigada 031.
Actualmente 10 mujeres de las 31 que conforman el grupo ya trabajan apagando incendios en el municipio de Valle de Bravo. Además, ponen a disposición de sus comunidades sus capacidades para prevenir y controlar incendios forestales con actividades como mantenimiento de brechas cortafuego, manejo de materiales combustibles del bosque, revisión de áreas forestales para identificar riesgos potenciales como la acumulación de vidrios y demás basura, talleres de capacitación y pláticas de sensibilización a la población en general, particularmente a jóvenes, niñas y niños.
