Inicio Columnista De la estigmatización y la brutalidad policial contra feministas

De la estigmatización y la brutalidad policial contra feministas

Por Lucía Lagunes Huerta

Cómo entender que la exigencia de las mujeres de vivir libres de violencia se reciba desde los gobiernos con violencia, cómo creer que verdaderamente hay una política de Estado en favor de la labor de mujeres periodistas y defensoras, cuando se tortura a una y otras.

Hace años que las feministas pasamos de las poquitas a la multitud. La marcha del 24 de abril #24A, de 2016 inundó el paseo de la reforma de morado, era claro, la semilla sembrada por el feminismo durante un siglo florecía a la par de las jacarandas. A partir de entonces nada volvió a ser igual.

Las marchas se llenaron de batucadas, y los más diversos performances y empezamos a contar la presencia de las mujeres por miles, a la par de este maravilloso florecer, la represión policial fue apareciendo como la sombra, supusimos que era la clásica lógica con la que gobiernos autoritarios han enfrentado las movilizaciones juveniles desde 1968.

Pero no eran iguales, esta represión contra las manifestantes feministas esta plagada de misoginia que se refleja en las palabras, el abuso sexual y la tortura.

No toleran que las mujeres se organicen, rompan el silencio e interpelen públicamente al poder, que en su gran mayoría sigue tomado por los hombres.

Las calles también son nuestras, fue una consigna y una posición política de recuperar el espacio público que la violencia machista nos ha arrebatado.

Y seguimos saliendo a la calle, en 2019 llegamos al 8M con un nuevo gobierno federal, que ya sabíamos no era feminista ni de cerca, pero no teníamos la dimensión de su misoginia, entendamos el odio hacia las mujeres, especialmente hacia las que rompen con la sumisión, hablan fuerte y dejan la huella de su paso y sus demandas en los muros y monumentos.

Aprovechando el poder de investidura y de la palabra se construyó una narrativa que al principio fue acompañada por los medios de comunicación: “las feministas son violentas” porque rompen parabuces, vidrios y pintan monumentos.

La narrativa sostenida por cinco años ha generado que la represión policial crezca a lo largo y ancho del país, y este año no fue la excepción.

De acuerdo con la Red Nacional de Defensoras en las manifestaciones del Día Internacional de la Mujer, en ocho entidades se usó, gas lacrimógeno, polvo extintor, gas pimienta, detención arbitraria y criminalización. Mientras CIMAC reporta que en seis estados 19 periodistas fueron agredidas, es decir en 11 entidades se registraron atentados al derecho a manifestarse y a la libertad de expresión.

Acciones que contradicen completamente el discurso institucional que vemos en foros, ceremonias gubernamentales y boletines que conmemoran el Día Internacional de la Mujer.

Y para muestra basta un botón, pues mientras los cuerpos policiales arremetían contras las manifestantes feministas este 8M, el Mecanismo de Protección Federal, reconocía la labor de las defensoras y las mujeres periodistas por fortalecer la democracia y el estado de derecho, y asegura que es una tarea permanente del Estado Mexicano garantizar que puedan hacer su labor en condiciones de seguridad, dicho en el comunicado número 20 que subieron a redes sociales el mismo 8 de marzo.

Puede ser, que esa sea la visión de quienes dirigen el Mecanismo, pero no lo es del Estado Mexicano, si lo fuera el abuso policial en Zacatecas, Puebla, Tlaxcala, Colima, Chihuahua, Oaxaca, Nuevo León, San Luis Potosí, estado de México, Michoacán y Ciudad de México no hubiera ocurrido y esta columna no tendría razón de ser.

Pero no es así, porque el discurso de odio del ejecutivo federal se toma como permiso por parte de gobernadores y funcionarios, y más si son del mismo partido en el poder, sino cheque usted, pues de las 11 entidades en las cuales se registraron abuso policial  8 son gobernadas por Morena, incluida, por supuesto la peor de este año Zacatecas, una que los demás se acomodan a la sombra del presidente pues tambien hay gobiernos del Verde, el PAN y Movimiento Ciudadano.

Claro que no podemos hablar de una visión de Estado que genera que las periodistas y las defensoras hagan su labor de forma segura, como sostener este dicho cuando desde 2019, vemos con enorme preocupación el incremento de la violencia contra las manifestaciones feministas, o se nos olvidó la represión con armas de fuego el 9 de noviembre en Cancún,  el desalojo violento en Ecatepec, estado de México, las represiones policiales en Chihuahua y en León e Irapuato ambos en Guanajuato, las gaseadas y encapsulamientos en Ciudad de México, Solo por mencionar  algunas.

En todas, el actuar policial es desproporcionado contra las mujeres feministas, están enojados porque ya no les temen, por ello se ensañan con la violencia física, la violencia verbal sexualizada y retadora, la tortura y la violencia sexual.

Nada justifica el actuar misógino de los gobernantes ni de los cuerpos policiales, quienes actúan violentamente ante las mujeres autónomas que se manifiestan, gritan, pintar muros y exigen a los gobiernos que actúen de manera efectiva para detener la violencia feminicida.

Pues tal cual describen las pancartas “disculpen las molestias que la marcha les ocasione, pues nos están matando”.

También en Cimacnoticias

Este Web utiliza cookies propias y de terceros para ofrecerle una mejor experiencia y servicio. Al navegar o utilizar nuestros servicios el usuario acepta el uso que hacemos de las cookies. Sin embargo, el usuario tiene la opción de impedir la generación de cookies y la eliminación de las mismas mediante la selección de la correspondiente opción en su Navegador. En caso de bloquear el uso de cookies en su navegador es posible que algunos servicios o funcionalidades de la página Web no estén disponibles. Acepto Leer más

-
00:00
00:00
Update Required Flash plugin
-
00:00
00:00
Ir al contenido