Ciudad de México.- Irma Fregoso, activista, abogada y feminista fue asesinada en Puerto Vallarta, el pasado 15 de julio, cuando cruzaba la calle Nicaragua en la colonia 5 de diciembre. El ataque fue directo. Hoy, las colectivas exigen justicia y su nombre pasa a la lista de defensoras víctimas de feminicidio en este sexenio.
El Ministerio Público y la Policía de Investigación han referido que se encuentran trabajando de acuerdo con los protocolos establecidos para dar con el paradero de quien o quienes resulten responsables del crimen, por lo que lo único que se espera, es que la justicia esclarezca lo sucedido sin discursos revictimizantes sobre el trabajo que ejercía, desde el feminismo, Irma Fregoso.
La Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en México (RNDDHM) informó que desde el año 2020 al 2023, 33 mujeres periodistas y defensoras de derechos humanos en México fueron víctimas de feminicidio y 23 tentativas de asesinatos, de acuerdo con el Registro Nacional de la Red de México, que señala que mil 547 mujeres periodistas y defensoras de derechos humanos de este país han sufrido hasta 6 mil 870 agresiones diversas.
Vicepresidenta de la colectiva feminista 50+1 y activista a favor de las mujeres en situación de violencia, el movimiento empuja para que la agresión contra Irma Fregoso no derive en impunidad, un compromiso que la Fiscalía General de Justicia del Estado de Jalisco ha externado refiriendo que se trabajará en la investigación por todos los medios que dictan los protocolos.
Defensoras, activistas y buscadoras: víctimas de homicidio
Solo en 2023, la oficina de las Naciones Unidas documentó, al menos, 13 asesinatos de personas defensoras de los derechos humanos en posible relación con su labor. El primero de este año corresponde al de una madre buscadora: Teresa Magueyal.
Es en la ciudad de Celaya, Guanajuato donde gestó el caso Teresa Magueyal quien perdió la vida luego de ser abordada por sujetos que viajaban en una motocicleta y le dispararon a quemarropa; la activista perteneciente a la colectiva buscadora Una promesa por cumplir, fue asesinada de manera cruenta y hasta hoy, no hay sentencia contra los responsables, ni información sobre el motivo del ataque.

Elizabeth G; El 9 de mayo, se registró el feminicidio de la abogada y defensora de las mujeres quien se desempeñaba en la Comisión Ejecutiva Estatal de Atención a Víctimas de Jalisco y en el Centro de Justicia para la Mujer. Según se detalla, vecinos dieron alerta a las autoridades de detonaciones de arma de fuego en la delegación jalisciense de Ixtapa.
Al arribar las autoridades, Elizabeth ya había sido víctima de homicidio y mostraba signos de tortura en el cuerpo. La fiscalía regional informó que la abogada fue atacada por un hombre desconocido mientras ella se encontraba al interior de su auto, tras recibir los impactos de bala, Elizabeth intentó ingresar a su casa, donde probablemente, el agresor ejerció violencia contra ella y finalmente, la defensora perdió la vida en las escaleras del inmueble. Sobre este caso, no hay detenidos.

Rosario Lilian Rodríguez Barraza, madre buscadora en Sinaloa, salía de la misa conmemorativa de su hijo desaparecido, desde 2019 identificado como Fernando Ramírez, cuando fue interceptada por unos hombres al borde de una camioneta; su secuestro duró unos días y después, su cuerpo fue abandonado al sur de Sinaloa.
Anteriormente, Rosario Lilian Rodríguez había pedido ayuda a las autoridades para que la protegieran, pues denunció en sus redes que estaba siendo perseguida por hombres armados, aunque la línea de investigación se abrió y el gobernador sinaloense Rubén Rocha Moya, señaló que se investigaría a fondo, aún no hay ninguna sentencia, ni persona aprehendida por este caso de secuestro y asesinato.
La criminalización por el ejercer como activistas, buscadoras y defensoras, se ha convertido en una media en México donde predomina la impunidad; es necesario recordar la vivencia de todas estas mujeres y no quitar el dedo de renglón: No habrá comodidad, ni silencio hasta que la defensa a la vida sea un trabajo seguro, protegido, no criminalizado y reconocido por el Estado.
Nombrando a Irma Fregoso, se demanda a las autoridades de Jalisco a continuar con las investigaciones correspondientes, instando también, a no zanjar el caso de Elizabeth G., sucedido en la misma entidad.