Oaxaca.- Acusan al Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica (Conalep) por incurrir en prácticas discriminatorias contra la directora del plantel del municipio de San Antonio de la Cal en Oaxaca. Por estar embarazada la despidieron.
La víctima de nombre Jaqueline Barradas Santana denunció que periódicamente su contrato había sido renovado de manera automática en tres ocasiones, pero todo cambió a partir de su embarazo, hoy de 38 semanas. Coincidentemente -destacó- a lo largo de su embarazo ha sido objeto de distintos actos de discriminación, violencia de género, violación a sus derechos humanos, así como hostigamiento presuntamente por la coordinadora Esther S.M., y Carlos S., representante estatal de la institución.
Sin razón justificada y sin un aviso previo, el Conalep determinó ya no renovar el contrato. El 18 de agosto de 2023, a través de una llamada telefónica fue notificada que tenía que dejar el plantel o que sería desalojada por la fuerza.
“Sufrí violencia de género en relación a la violencia laboral que es la negativa en rechazar contratar a la víctima o respetar su permanencia y condiciones generales de trabajo, de igual forma por la intimidación y las humillaciones por mi condición de embarazo. Sufrí violación de mis derechos humanos, me dejó sin atención médica porque es un derecho contar con atención médica ISSTE en caso del Conalep”.
De acuerdo con la víctima, el representante estatal de este sistema de educación media superior le indicó que por estar embarazada daba mala imagen al plantel.
Tras lo anterior demandó la actuación legal y destitución de Esther S.M., y Carlos S.,de sus funciones por sus actitudes misóginas en su contra, así como por la violación a sus derechos humanos.
Es importante destacar que la Ley Federal del Trabajo prohíbe el despido de una mujer durante su embarazo y considera injusta la práctica de un empleador al despedir a una trabajadora por estar embarazada o forzarla, de manera directa o indirecta, a renunciar, cambiar su estado civil o tener ingresos menores.
Además, una reforma de 2019 en la Ley Laboral establece que, si un empleador despide a una mujer embarazada por una causa justificada, debe mantener los beneficios de la seguridad social durante seis meses después del nacimiento del niño.
