Ciudad de México.- Para 2050, 75% de empleos se relacionarán con áreas STEM (acrónimo en inglés que hace referencia a Science, Technology, Engineering and Mathematics), sin embargo, hoy las mujeres ocupan 22% de los puestos en inteligencia artificial y solo el 57% de ellas utilizan internet, esto, de acuerdo con datos de la Asamblea General Organización de las Naciones Unidas, por eso es fundamental acercar a las niñas a estas áreas y prepararlas para las carreras del futuro.
De acuerdo con ONU Mujeres, más del 60% de las niñas y niños que hoy ingresan a la escuela primaria ocuparán empleos que hoy no existen.
Hay una brecha digital de género en México, de acuerdo al IMCO, únicamente 3 de cada 10 personas profesionistas dedicadas a la ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas son mujeres. El organismo plantea que de mantener esa inercia, México tardaría 37 años en incorporar a medio millón de mujeres para cerrar esa brecha.
Aunque el futuro es digital, solo un tercio de las personas que trabajan en las disciplinas de ciencias, tecnología e ingeniería (TICs) son mujeres, lo que significa que el futuro está siendo diseñado por una mayoría de hombres y esta tendencia se debe revertir.
Las mujeres tienen un acceso restringido en la gobernanza del mundo digital y las que trabajan en el sector, muchas veces abandonan su puesto ante la ausencia de un entorno digital seguro, o porque se siguen haciendo cargo de la mayor parte del trabajo en el hogar.
En la mayoría de los países de América Latina y el Caribe, la proporción de mujeres graduadas de carreras ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas no supera el 40%, informó la Comisión Económica para América Latina y el Caribe, CEPAL en marzo del 2023.
Estas áreas como ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, carreras donde las mujeres han estado históricamente subrepresentadas, pueden cambiar.
Pero para lograrlo es necesario dar a las niñas y adolescentes igualdad de oportunidades para desarrollar y prosperar para reducir la brecha salarial de género; mejorar su seguridad económica; garantizar una fuerza de trabajo diversa y evitar sesgos en estos campos y en los productos y servicios elaborados.
La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible coloca a las áreas de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas como espacios que impulsan la construcción de sociedades más inclusivas y sostenibles.
Dentro de las STEM, las áreas educativas más dominadas por los hombres son las TIC y las ingenierías, donde la matriculación de mujeres es de 27% y 28% respectivamente (UNESCO, 2018). Al ritmo actual, no se logrará alcanzar la paridad de género en STEM antes del año 2100.
Nuevas narrativas
Construir narrativas y nuevos mundos resulta natural, tanto para las niñas como para jóvenes mujeres, eso es debido a la frescura e imaginación desbordada que albergan. En tiempos recientes, el mensaje de diferentes grupos y colectivas de mujeres se ha potenciado gracias a herramientas tecnológicas como los teléfonos inteligentes y al alcance global de las redes sociales.
Para Claudia Laudano, doctora en Ciencias Sociales por la Universidad de La Plata, quien también se ha adherido a las causas del feminismo desde su juventud, allá en la Argentina, le resulta asombroso como las jóvenes han podido escalar y amplificar como si fuese un megáfono su mensaje y demandas para vivir una vida libre de violencias.
Para Laudano, es vital eliminar los estereotipos que siguen considerando que el tiempo de niñas y mujeres debe emplearse para el cuidado de los demás y que carreras como ingeniería, física, matemáticas, entre otras, sean considerados como espacios masculinos.
Cambiemos la conversación
La académica Claudia Laudano señaló que, aunque, en la sociedad con estructuras patriarcales existen capas sedimentadas que son muy difíciles de cambiar, debido a su grosor, de unos años para acá las jóvenes han logrado cambiar paradigmas, han podido establecer y, además, ganar la batalla en diferentes arenas de la causa feminista.
En tiempos recientes, las jóvenes en la región sur del continente, en Argentina, conscientes de sus derechos y del alcance que tienen las redes sociales, han conseguido su propósito: ser escuchadas e impactar en el planteamiento y desarrollo de nuevas políticas para las mujeres, más inclusivas y que respeten su libre tránsito, sin ser acosadas.
Y es que su activismo en las diferentes redes sociales, como Facebook, X (antes Twitter), Instagram y más recientemente Tik Tok, han conseguido generar comunidad, abrir la comunicación y los espacios, convocar a marchas y, hasta han conseguido paros nacionales de mujeres para visibilizar las circunstancias que limitan su accionar, en el día a día.
“Estas miradas feministas del mundo que se quiere habitar y que las colectivas de mujeres se pudieron plantear y también en sus distintas dimensiones transformar la realidad, han sido posibles, gracias al empleo de las diferentes herramientas que hoy tienen al alcance las jóvenes en la palma de su mano”, señaló la especialista.
Entonces temáticas de tanto peso para el feminismo tales como, el derecho a decidir, el acoso callejero, la violencia en los medios digitales hacia las mujeres y, un sinfín de temas se han podido evidenciar e instalar en la conversación gracias al empleo que han realizado las nuevas generaciones de jóvenes mujeres que utilizan las nuevas herramientas tecnológicas a su alcance.
Feminismo digitalizado
En abril del 2019, el Senado argentino aprobó una ley que considera el acoso a las mujeres en la calle y en espacios públicos como una forma de violencia de género.
La norma consideraba esta violencia como “aquella ejercida contra las mujeres por una o más personas, en lugares públicos o de acceso público, como medios de transporte o centros comerciales, a través de conductas o expresiones verbales o no verbales, con connotación sexual” que dañaran su dignidad, integridad, libertad, libre circulación o permanencia o generaran un ambiente hostil.
Un grupo en particular de activistas del ciber espacio en América Latina fueron pioneras al experimentar en 2014 con la práctica digital, a la que llamaron, “twitazo” o “tormenta de twits”, el punto focal del grupo era ejercer la crítica y detener el acoso callejero.
La especialista argentina, reflexionó, “me parece importante resaltar la cuestión de la creatividad y el despliegue de la imaginación ciber feminista porque nos encontramos con estilos muy diferentes de aterrizar las ideas en los diferentes grupos, que se podría decir que comparten la visión general”.
Lo anterior pone de manifiesto que tanto las redes sociales como las nuevas herramientas tecnológicas han democratizado la vida de las mujeres, ya que ha permitido que se abran los micrófonos y que su voz pueda resonar más allá de las fronteras, o que resulten escuchadas en lugares donde antes pasaban desapercibidas, lugares tales, como algunas instancias gubernamentales o legislativas.
Otra de las luchas feministas, conquistada por las mujeres argentinas, se dio en gran parte gracias a su activismo en redes, a las denuncias y a las movilizaciones de colectivas unidas por un objetivo: la despenalización del aborto, en aquella región del cono sur del continente americano.
En el 2002, Argentina celebró la histórica aprobación de la ley que habilitó la interrupción legal del embarazo hasta la semana 14 de gestación, un logro que sirvió como inspiración para que otros países de Latinoamérica avanzaran en el reconocimiento del acceso al aborto legal y seguro para que las mujeres lograran su autonomía corporal.
La movilización, el activismo, el acuerpamiento y la comunión de la juventud argentina se dio gracias a que nuevas tecnologías, como los teléfonos celulares, que en la palma de la mano les brindaron acceso a servicios de cómputo, telefonía, cámara fotográfica y equipo de video, les permitieron interactuar y emitir mensajes en cuestión de segundos.
Es decir, a solo 10 o 15 años de que los teléfonos inteligentes entraron a la escena global, los obstáculos de tiempo y recursos económicos se subsanaron, permitiendo que cada una de las mujeres que los portaban pudieran emitir un mensaje instantáneo, pero haciendo las veces de megáfono, que se reprodujera en diferentes partes del mundo a la vez.
Actualmente, ya estamos acostumbrados a vivir de la mano con estas tecnologías, no obstante, para el movimiento feminista también ha sido una revolución, tan solo si comparamos a las circunstancias en las que una mujer hacía valer sus derechos en la década de los 70s del siglo XX, estamos ante otra realidad, pero también son otros sus efectos, el impacto de los mensajes se amplifica y llega, más pronto, a donde tiene que llegar.
Brecha digital
El Día Internacional de las Niñas en las TIC fue establecido en 2010 por los estados de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) y la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en el marco de las políticas de promoción de la igualdad de género con el motivo de alentar las vocaciones tecnológicas en las niñas y jóvenes. Recientemente, se estableció que sea celebrado el cuarto jueves de abril de cada año.
Acercar a las niñas y jóvenes a las TICs es una gran idea, una de las mejores razones, son: las oportunidades de empleo disponibles en el sector de las TIC, el sector necesita con carácter urgente una gran variedad de talentos relacionados con estas destrezas, existe una brecha cada vez mayor entre las competencias digitales que requieren los empleadores y el número de solicitantes de empleo con los conocimientos técnicos necesarios.
De lo anterior se infiere que las mujeres altamente cualificadas en campos técnicos tendrán a su disposición numerosas oportunidades. Sin embargo, faltan estudiantes preparados para cursar estudios superiores en matemáticas, ingeniería, computación y ciencias. En consecuencia, el número de mujeres matriculadas en estudios técnicos es desproporcionadamente bajo.
La inclusión de las niñas y jóvenes en las TIC empieza desde los hogares y se motiva en los centros de estudio para que juntos creen una red de apoyo hacia ellas, por lo que es primordial desarrollar una educación con perspectiva de género para que se reconozca que las ciencias exactas y las ingenierías no son estructuras patriarcales y que se necesita de más recursos humanos en la innovación tecnológica.
La tecnología puede facilitar el empoderamiento de las mujeres y las niñas en todo el mundo. La era digital ofrece una oportunidad sin precedentes para acabar con todas las formas de disparidad y desigualdad, incluyendo la existente entre hombres y mujeres.
Las mujeres experimentan condiciones más precarias cuando acceden a internet, plantea el documento La igualdad de género y la autonomía de las mujeres y las niñas en la era digital: aportes de la educación y la transformación digital en América Latina y el Caribe, elaborado por la CEPAL, la Entidad de las Naciones Unidas para la Igualdad de Género y el Empoderamiento de las Mujeres (ONU-Mujeres) y la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
El acceso a oportunidades laborales mejor remuneradas para las mujeres, en los años por venir está íntimamente relacionada con las capacidades y destrezas que adquieran. Por lo que resulta importante que las mujeres y sus familiares pongan atención especial al tipo de educación adquirida, ya que esto será lo que les permita salir adelante, en mejores condiciones.
La niñez y la ciencia
El informe ¿Dónde están las científicas? realizado en el 2022 por el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), en el que se destaca que las causas de la falta de representación de mujeres en profesiones dedicadas a la ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas arranca desde la niñez.
El estudio señala que, debido a los estereotipos, normas de género, el ambiente en las clases, la poca visibilidad de modelos de mujeres a seguir y la deficiencia en orientación vocacional, se provoca en las niñas poco interés y falta de confianza propia en sus habilidades en matemáticas y ciencias.
LOA/OLO
