Este jueves 27 de julio, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) afirmó que es falso que el Ejército no quiera colaborar en las investigaciones del Caso Ayotzinapa. Además de los padres de los 43 normalistas desaparecidos y sus representantes legales, la percepción es completamente distinta , por ejemplo, para integrantes de colectivos de búsqueda como Delia Quiroa Flores Valdez, quien además de corroborar la falta de apoyo de las Fuerzas Armadas, señala que éstas continúan perpetrando crímenes de Estado en entidades como Culiacán, Sinaloa.
En entrevista para Cimacnoticias, Flores Valdez —abogada y fundadora del colectivo de búsqueda 10 de marzo— declaró que actualmente se encuentra en Culiacán acompañando el caso de dos jóvenes que fueron agredidos por personal de la Secretaría de Marina (SEMAR). Ella conoció el caso porque primero reportaron la desaparición de los dos hombres; sin embargo, dos horas después del reporte, encontraron a uno de los jóvenes muerto y a otro con heridas de bala.
El sobreviviente señaló a miembros de la Marina como sus agresores. De acuerdo con Delia Quiroa, los marinos cerraron el paso a la motocicleta donde viajaban ambos jóvenes, los bajaron a golpes y les ordenaron que corrieran para luego dispararles por la espalda. Todo esto, sin tener una justificación para haber agredido a los dos varones.
Quiroa Flores (cuyo hermano fue víctima de desaparición forzada) declara que esta situación no es nueva en Culiacán. Al respecto, narra que estas ejecuciones arbitrarias comenzaron desde antes de 2019; si bien pararon en algún momento, ese año —afirma— las agresiones por parte de la Marina contra la ciudadanía se reanudaron y desde entonces no han parado.
“Son por lo menos de dos a cuatro ejecuciones al mes”, contó a Cimacnoticias. Además, agregó que la mayoría de víctimas de ejecuciones e intimidaciones han sido motociclistas, quienes probablemente son confundidos con “punteros o halcones” del crimen organizado. Sin embargo, las autoridades no les dan oportunidad de aclarar nada y simplemente los atacan.
La activista detalló que este lunes 31 de julio se llevará a cabo una manifestación en Culiacán para pedir una tregua de paz a la Marina. “Las familias no pueden estar así, temiendo por sus vidas”, lamentó. También aseguró que casos como este demuestran el poder ilimitado y la impunidad que se le ha otorgado a las Fuerzas Armadas, quienes, aun así, son defendidas por el presidente de México.
Colectivos de búsqueda respaldan a familias de Ayotzinapa
En su labor de defensa de los derechos humanos, tanto Delia Quiroa como otras mujeres en busca de sus familiares se han encontrado con más casos donde los responsables de la desaparición de sus seres queridos son agentes del Estado. Así sucedió con Roberto Quiroa Flores Valdez, hermano de Delia, quien fue desaparecido en mayo de 2014.
Según cuenta la propia Delia, Roberto fue secuestrado y, cuando lo estaban trasladando en una camioneta, elementos de la Marina dispararon contra el vehículo. El joven de entonces 38 años de edad perdió la vida durante el ataque y los marinos se llevaron su cuerpo, el cual, hasta el momento, no ha sido entregado a su familia.
Delia Quiroa detalla que, aunque hay una carpeta de investigación abierta en la Unidad Especializada en Investigación de los Delitos de Desaparición Forzada de la Fiscalía, la Marina se ha negado a dar acceso a la bitácora de lo sucedido aquel día ni a algún otro dato que ayude a la localización del cuerpo de Roberto.
Esta actuación por parte de las Fuerzas Armadas se repite un caso tras otro. “Es un poder ilimitado el que se les ha dado para abusar y tener a las familias atoradas”, opina la abogada Delia Quiroa al respecto. Agrega que la política de “abrazos, no balazos” defendida por López Obrador da libertad a los criminales y también a las Fuerzas Armadas, las cuales se saben impunes para abusar de la población sin que haya consecuencias al respecto.
“Es gente que porta un uniforme que le debe brindar confianza a la ciudadanía. Ese uniforme representa la protección y el cuidado a los mexicanos”, declara la activista. “Ellos no quieren enseñarnos sus registros, nada. No quieren dar información para identificar a los agresores”, concluye.
Quiroa Flores Valdez, además, reconoce la gravedad del Caso Ayotzinapa, cuya magnitud —por otro lado— no ha sido suficiente para que la actitud del gobierno y de las Fuerzas Armadas sea distinta. Tanto la abogada como otros colectivos de mujeres buscadoras están en contacto con madres y padres de Ayotzinapa, y ya están preparando sus posicionamientos para exigir a la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) que abra los archivos aún ocultos para concluir con la investigación y esclarecer lo sucedido aquel 26 de septiembre de 2014.
Entre las agrupaciones que emitirán su postura al respecto se encuentran el colectivo 10 de marzo, Madres Buscadoras de Sonora, Madres Buscadoras de Jalisco y AGAPE, grupo de búsqueda de Nayarit.
Mujeres buscadoras responden a AMLO por defender a SEDENA
Este 27 de julio, Andrés Manuel López Obrador dijo que “ya se rompió el llamado pacto de silencio” en el Caso Ayotzinapa y agregó que es mentira que SEDENA y la Marina no estén colaborando en las investigaciones al respecto. “Si se ha avanzado es por la colaboración precisamente de Marina y de Defensa”, aseveró al decir que respeta el “punto de vista” del Grupo Interdisciplinario de Expertas y Expertos Independientes (GIEI), quien señaló con evidencias la falta de colaboración y la manipulación de información por parte de las Fuerzas Armadas.
El gobierno le cerró las puertas al GIEI —asegura Delia Quiroa—, y ahora el presidente intenta defender a estas instituciones (agrega) al decir que se está buscando socavarlas por señalar sus errores. AMLO también sugirió que quienes han hecho estas acusaciones contra las Fuerzas Armadas son parte de la oposición que busca dañar a su gobierno, aseveración que ya encontró respuesta por parte de Cecilia Flores Armenta, fundadora del colectivo de Madres Buscadoras de Sonora.
“Las madres buscadoras no somos opositoras”, aseguró en un video difundido a través de sus redes sociales. También remarcó la apatía, insensibilidad, burocracia y el nulo apoyo que tanto ella como otras madres buscadores tienen por parte de las autoridades en la búsqueda e investigación sobre los casos de desaparición forzada de sus familiares.
“No somos prioridad para las autoridades”, lamenta al respecto. Estas aseveraciones incluyen a las Fuerzas Armadas, quienes, como en el caso de Roberto Quiroa Flores Valdez, no solo actuaron con omisión sino que también formaron parte directa de los ataques. Y, así como con los 43 normalistas de Ayotzinapa, ahora se niegan a dar información que revele la verdad sobre su papel en estos delitos.
