Ciudad de México.- En América Latina se diagnostican cada año más de 115 mil casos de cáncer de mama y en ese mismo lapso de tiempo fallecen cerca de 37 mil mujeres en la región, debido, en parte, a la detección y tratamiento tardíos de la enfermedad, una responsabilidad desatendida por el Estado que deja en el abandono a las mujeres y que, tan solo en México, ha provocado que el cáncer de mama sea una de las principales causas de muertes en las mexicanas.
En el marco del mes de sensibilización sobre el Cáncer de Mama, la Secretaría de Salud dio a conocer que en México las principales causas por las cuales las mujeres no acuden a realizarse la mastografía son el miedo a saber que pueden padecer cáncer de mama, y la percepción de que el estudio es doloroso.
Así lo muestran los resultados del estudio Factores asociados con el uso de la mastografía en un entorno de recursos limitados, publicado en 2018 y desarrollado con metodología cualitativa y cuantitativa por investigadoras e investigadores de los institutos nacionales de Salud Pública (INSP) y de Cancerología (INCan) de la Secretaría de Salud, en conjunto con otras dependencias a nivel mundial.
La directora de Enfermedades Cardiovasculares, Diabetes Mellitus y Cáncer del INSP, Gabriela Torres Mejía, detalló que el objetivo del estudio, en el cual participaron 455 mujeres de 40 a 69 años, fue evaluar los elementos que facilitan o que representan una barrera para que las mujeres acudan a realizarse la mastografía.
En este sentido, el miedo a recibir un diagnóstico de cáncer y la creencia de que la mastografía es un procedimiento doloroso, fueron las barreras para realizarse este estudio.
Para evitar el dolor durante el procedimiento, Gabriela Torres recomendó acudir a realizarse la mastografía a partir del décimo día de la conclusión del periodo menstrual o 10 días antes de que inicie, momento en que las mamas son menos sensibles.
Respecto al miedo a recibir un diagnóstico de cáncer de mama, la especialista exhortó a las mujeres a acudir a realizarse el estudio, ya que cuando el tratamiento inicia en las primeras etapas de la enfermedad, la probabilidad de curación es muy alta.
Asimismo, indicó que el conocimiento que tienen las mujeres sobre hacerse la mastografía cada dos años entre los 40 y 69 años, y el antecedente de haberse hecho la prueba de detección de cáncer cervicouterino llamada Papanicolaou, contribuyen a que las mujeres decidan hacerse la mastografía.
Detección de cáncer de mama, responsabilidad de instituciones
Aunque el temor es mencionado como una de las principales limitantes para que las mujeres acudan a realizarse una mastografía, lo cierto es que tanto en México como en América Latina «hay una carencia de técnicos y médicos radiólogos especialistas en imagen mamaria», señala la investigación Resultados del primer programa de detección oportuna de cáncer de mama en México mediante pesquisa con mastografía, realizada en 2009.
Lo anterior ha provocado que en América Latina y el Caribe la proporción de mujeres afectadas por la enfermedad antes de los 50 años (32%) es mucho mayor que en América del Norte (19%), de acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
DE mantenerse las tendencias anteriores, el mismo organismo destaca que, para el año 2030, se podría producir un aumento del cáncer de mama en las Américas, con unos 572 mil casos nuevos y 130 mil muertes.
Por ello se recuerda la responsabilidad que tienen los gobiernos de América Latina con las mujeres, donde se debe garantizar acceso a servicios médicos integrales de detección y tratamiento del cáncer de mama.